La villa se asentó originariamente sobre una hoz del río Cañada, en Monjuí, un espolón rocoso de fácil defensa. Posteriormente fue creciendo, formándose otros tres barrios (La Villa, San Cristóbal y Santa Bárbara) que ocupan emplazamientos menos abruptos.
En el Monjuí se encuentran los restos de las fortificaciones, casi sepultadas bajo el cementerio, y de la antigua iglesia, posiblemente de factura románica. Pero es en el contiguo barrio de La Villa donde se sitúan los edificios más monumentales, presididos por la Iglesia de la Asunción de La Cañada, las antiguas Casas consistoriales de La Cañada (1540) y el Hospital de los Pobres (1568); estos dos últimos con sendas lonjas de tres y dos arcos, respectivamente; en su entorno también podemos encontrar el horno y alguna casona. En el barrio de San Cristóbal está la discreta Ermita de San Cristóbal en La Cañada que le da nombre y el caserón de La Posada. Cerca del casco urbano también se localiza la ermita de Santa María Magdalena.
Las fiestas patronales, en honor a San Juan Bautista, se celebran el 24 de junio, teniendo también especial relevancia la Fiesta del Pilar (12 de octubre).