Los pósitos fueron instituciones muy difundidas en el siglo pasado y especialmente presentes en municipios de tradición agraria.
Del pósito de Cantavieja se encuentra documentación muy variada, desde partes del movimiento hasta los préstamos personales o las relaciones de deudores.
Concretamente los partes de movimiento, que suscribían presidente, secretario y depositario del pósito, tenían dos fines bien específicos. El primero de ellos era controlar la existencia en efectivo que figuraba en arcas y la lista de todas las deudas vigentes para las arcas locales.
La segunda la lista de valores y bienes en posesión del pósito. En la mayoría de los casos eran terrenos agrarios, de los que se especificaba su situación, linderos o extensión.
Los partes de movimiento se conforman como una serie diezmada pero que abarca varias décadas.