Este edificio se encuentra en regular estado de conservación, a juzgar por el aspecto de los diferentes elementos que conforman su fachada. No obstante, gracias a dicho estado, se puede documentar la utilización de distintos sistemas constructivos y de diferentes materiales empleados en la edificación de estas arquitecturas.
Mientras que el vano de acceso se conforma a partir de un arco rebajado, en la parte inferior de la jamba de la izquierda pueden verse sillares de piedra. Asimismo, la mayor parte del resto de los muros presentan mampostería irregular.
Toda la estructura fue posteriormente enlucida con una gruesa capa de mortero de cal sobre la que aplicó una decoración de esgrafiado a imitación de sillares. También se aprecian reparaciones más modernas en la base del muro de la fachada y en alguno de los vanos, modificados en tamaño, utilizando ladrillos vistos, lo que desvirtúa el aspecto original de la obra.