El Centro de Restauración de la Fundación Santa María de Albarracín lleva a cabo el proyecto de recuperación de las pinturas murales en la ermita de Santa Lucía de Molinos, habiéndose concluido previamente, los trabajos en la ermita de Tronchón, donde la Cofradía del Tremedal contribuyó en la financiación de 50.000 euros que costó el proyecto de restauración. Fue un trabajo muy complejo, en el cual se recuperó la decoración de los muros, saliendo a la luz decoración vegetal y figuras de tamaño natural en la cúpula.
Contando con un gran equipo de trabajadores, el centro de restauración actúa en Molinos en una construcción del siglo XVIII, donde las pinturas del interior se encuentran muy deterioradas. Dos de las restauradoras que trabajan actualmente, se han tenido que enfrentar a varias dificultades como es la humedad y los repintes con pintura plástica que sufrieron con anterioridad. Pese a ello, se hará todo lo posible para recuperar la pintura colorista, como es propio de época barroca en Teruel que decoraba las pechinas y cúpula de la nave.
Como sucedió en Tronchón, las cofradías asumieron parte del gasto económico con aportaciones que proceden de suscripciones populares, que cada vez más se preocupan por la recuperación del patrimonio.
Publicado por el Heraldo de Aragón, el 13 de junio de 2014